
Vitoria también se ha unido a la lista de diócesis que estarán en la XLIII Semana Social de España que tendrá lugar en Sevilla del 25 al 27 de noviembre.
El pasado 6 de noviembre tenía lugar el encuentro en el que el grupo de trabajo convocado por esta diócesis trabajaba el documento base: “La regeneración de la vida pública. Una llamada al bien común y a la participación. Guía de Trabajo para los Seminarios«.
Encuentro de trabajo en la diócesis de Vitoria
1.- Introducción a una mañana de debate (6.11.21)
Ante la invitación a participar desde y como diócesis de Vitoria, el Secretariado Social Diocesano y el Servicio Diocesano de Laicado se invitó personalmente a participar en un debate a personas cristianas que están o han estado en la Vida Pública de nuestra sociedad. La invitación fue personal.
La mañana de debate se realizó el 6 de noviembre de 2021. Hubo un trabajo personal previo que consistió en la lectura y reflexión del documento “La regeneración de la Vida Pública. Una llamada al bien común y a la participación”; además de dos preguntas para la reflexión personal: 1ª.- Primera valoración del documento; y 2ª.- Desde tu experiencia personal en la vida pública, ¿crees que es posible transmitir los valores del Evangelio?
Estas preguntas previas nos sirvieron para comenzar las intervenciones de los invitados.
A la convocatoria acudieron 16 personas de diferentes ámbitos de la Vida Pública. Los ámbitos fueron: Sindicatos (representando a varios sindicatos); Política (distintos lugares de ejercicio de la política y de distintos partidos políticos, desde parlamentarios a ejercer cargos de gobierno); Cultural (Universidad, Ámbito artísticos-cultural alavés, Escuela Pública…); Económicos (Empresas circulares…); Movimientos Vecinales y Plataformas Asociativas.
Los organizadores hicimos la tarea de moderación y secretaría del encuentro.
2.- La mañana del Debate (método seguido)
Los pasos que dimos a lo largo de mañana fueron los siguiente
a.- Presentación:
+ del Encuentro: el porqué, la dinámica a seguir, los organizadores…
+ de las Semanas Sociales: historia y planteamiento de la LXIII Semana Social
+ del contexto social, doctrinal y pastoral
b.- Los acentos del documento: “La regeneración de la Vida Pública. Una llamada al bien común y a la participación”.
c.– Presentación de los asistentes, respondiendo a la segunda pregunta enviada con antelación: “Desde tu experiencia personal en la vida pública, ¿crees que es posible transmitir los valores del Evangelio?”
d.- Primer turno de debate, respondiendo a la primera pregunta enviada con antelación: “Primera valoración del documento…”
Descanso y café
e.- Segundo turno de debate centrado en dos cuestiones surgidas del turno anterior: Participación y Pluralidad.
3.- Contenido de la mañana de debate
3.1.- Algunas ideas surgidas en la presentación de los invitados y basadas en su experiencia personal
+ Entendemos por espacio público un lugar donde podemos encontrarnos todos, aunque tengamos distinta ideología política, religiosa, etc.; un espacio donde podamos aportar.
+ El tema de fondo es la libertad. Aplicar la libertad en el día a día es complicado. El tema de la diversidad es luchar por la libertad real, que pasa por el respeto y esto nos falla. Hemos pasado de un extremo al otro en la sociedad.
+ Antes era obligatorio todo (nacional catolicismo) y ahora es obligatorio todo lo contrario (nacional ateísmo). Esto es no reconocer la libertad.
+ En los años 70 se produjo un debate interesante en la Iglesia. Cristianos de presencia o de mediación. Se quedó de acuerdo en que seamos Iglesia de mediación con los demás. Ahora la Iglesia solamente se ve como un espacio de poder dentro de la sociedad.
+ Partimos de una sociedad en shock por todos los cambios que ha habido en poco tiempo, en lo tecnológico, en lo político, en las estructuras familiares, en la sexualidad, en lo religioso, en los derechos sociales, en la inmediatez, en la incapacidad para la frustración y para valorar el esfuerzo y el sacrificio… Todo se ideologiza en la actualidad.
+ Se dice que la sociedad está en crisis y la Iglesia también. Dentro de esa crisis eclesial, los cristianos no somos críticos, nos callamos, no reivindicamos. Tenemos que cambiar y dar sentido a nuestra fe.
+ Yo me pregunto: ¿para qué quiero regenerar la vida pública? ¿Para seguir siendo el salvador, porque fuera de la Iglesia no hay salvación, porque yo tengo las respuestas, yo tengo la verdad? ¿Realmente me pongo al servicio?
+ Estamos viviendo en un mundo de pensamiento único. La Iglesia católica también es pensamiento único. La Iglesia cuando habla de regeneración ¿a quién está mirando? ¿Se está mirando ella o está mirando que hay que regenerar a la sociedad? Socialmente no es creíble. Y luego miras hacia atrás cuando haces algo y ves que caminas solo.
+ En la sociedad no se ve a la Iglesia como un ente dialogante. Regeneramos la sociedad, pero no nos regeneramos como Iglesia. Se ha perdido el sentido democrático en la Iglesia y en la sociedad.
+ Si todos nos leyéramos con atención el documento completo de los derechos humanos, eso nos daría unos principios éticos de funcionamiento. Hay que romper con los talibanismos y afrontar la pluralidad. Deberíamos poder sentarnos todos, llegar a acuerdos y avanzar desde ahí generando procesos, sin imposiciones.
+ Nos resulta muy difícil en la sociedad hoy, presentarnos como cristianos, porque no tenemos credibilidad, porque estamos muy lejos de la sociedad civil. Tenemos que asumir que vamos a ser señalados.
+ En el ámbito de lo religioso nos están echando a patadas de lo público. Hay una idea generalizada, incluso entre los propios cristianos de que la religión pertenece al ámbito de lo privado.
+ ¿Qué imagen y qué valores estamos transmitiendo los propios católicos? La sociedad, los jóvenes, valoran la solidaridad y los grupos eclesiales que se dedican a ella, pero no admiten el resto de lo que dice y hace la Iglesia, porque desde las cúpulas y los medios de comunicación de la propia Iglesia, se dan mensajes antievangélicos. Hay una especie de esquizofrenia dentro de la Iglesia.
+ La Iglesia tendría en estos momentos que hacer un proceso en ciertos temas actuales y polémicos como por ejemplo el colectivo LGTB, los accidentes laborales, que es un tema que rara vez se aborda en la Iglesia y otros.
+ A nivel individual sí es posible transmitir los valores del Evangelio, porque no podemos desvincularnos de lo que somos. Se nos olvida que tenemos otra herramienta muy valiosa y es la acción que llevamos adelante, invitando a otros a compartirla con nosotros. Trabajar desde 3 o 4 mínimos basados en los derechos humanos y buscar sinergias es lo que nos tiene que mover.
+ Es importante el tema de la ejemplaridad, de los testimonios. Es ahí donde podemos dejar la marca de cuál es el criterio de un cristiano actuando en la sociedad.
+ La presencia pública de los cristianos debe alejarse del imperativo de la distancia y de la tentación de poder.
3.2.- Respecto a la valoración del documento de reflexión (selección de ideas principales)
Dividimos las opiniones en dos bloques:
a.- Los aspectos positivos que descubrimos en el documento (algunas ideas dichas)
+ En general gusta porque en muy pocas páginas se dicen muchas cosas.
+ A nivel de principios está muy claro y sirve como base de trabajo.
+ Es un pretexto para el diálogo y un pre-texto como anticipo de otro documento definitivo posterior.
+ Hace reflexiones interesantes, como cuando habla de cultura del encuentro, de construir puentes, acercarnos unos a otros en diferentes espacios sin crispación donde se pueda construir en positivo a través del servicio público de los cristianos, incorporando a más gente para que haya más pluralidad.
+ Propone una vida pública orientada al bien común.
b.- Los aspectos a mejorar, asumiendo que es un documento de trabajo (documento pre-texto)
+ Habla de conceptos y nos pone a todos a la misma altura, pero no todos partimos de la misma situación y eso genera inquietud.
+ Está centrado en el colectivo y no en la persona y eso es un riesgo, centrarnos en el colectivo, en las estructuras, etc. Habría que hacer más hincapié en lo que hacemos cada uno para regenerar la sociedad.
+ No se ve el documento tan plural como la pluralidad de la que habla. Se centra mucho en la Iglesia Católica. Nosotros vamos a estar ahí, pero si queremos que otros vengan, tenemos que darles espacio.
+ Chirría cuando habla de evangelización, de salvación, parece que nosotros somos los que salvamos, que fuera de la Iglesia no hay salvación. Estas cosas no están implícitas en el documento, se desprenden de él.
+ Si lo comparamos con el documento “Católicos en la vida pública”, es mucho más reducido, con memos precisiones y menos concreciones. Le faltan cosas como por ejemplo una referencia al voto que el otro documento, aunque pequeña, la tiene. Le falta hablar también de la repercusión y las graves consecuencias del cambio climático que va a traer más pobreza, más injusticia y más desigualdad. Hay dos ámbitos que simplemente se citan y son: La ecología y la honestidad fiscal.
3.3.- Respecto al segundo turno de debate: Participación y Pluralidad
+ El relevo generacional es un tema que preocupa a todos los niveles, político, sindical, social, eclesial, etc. La sociedad está cambiando, pero ¿hacia dónde?
+ Institucionalmente se está empezando a trabajar en la dimensión espiritual del individuo, venga este de donde venga con sus propias circunstancias.
+ Lo primero para que haya un encuentro social, tenemos que definir qué es ser plural y que es ser diverso.
+ Si queremos hacer presencia en la vida pública, no podemos esconder que somos cristianos, debemos intentar vivir lo que creemos ahí donde estamos.
+ El tema de la escucha es fundamental. Para construir hay que escuchar. Hay una mentalidad en todos los ámbitos de imponer. Estamos en una fase de talibanismo generalizado en todos los ámbitos: político, cultural, social…Desde el compromiso cristiano se puede aportar mucho ahí.
+ Otro tema es el testimonio. Nos da miedo testimoniar porque estamos solos. No nos sigue nadie.
+ Públicamente cuando hablamos de presencia de la Iglesia, hablamos de presencia de Obispos.
+ Parece que los cristianos tenemos que constituir un grupo de presión en la sociedad. La sociedad es plural y la Iglesia también. Se habla de un laicismo positivo y un laicismo negativo. Esa es la pluralidad de la Iglesia.
+ Queremos una propuesta como comunidad cristiana de fraternidad, amistad social, de dejar el egoísmo, el individualismo y centrarnos en la pluralidad de la sociedad en un diálogo sincero, buscando la armonía en las diferencias.
+ Entendemos por pluralidad el respeto a la dignidad de la persona en todas sus dimensiones y en todas sus formas de pensar.
+ En nuestra sociedad no hay respeto a la pluralidad, como lugar donde pueda expresarme libremente. No hay crítica constructiva. A veces el encuentro es inviable porque no se quiere aceptar la pluralidad.
+ Dentro de la pluralidad, todo lo que sea salirse del respeto, de tener siempre presentes los derechos humanos, todo grupo que diga somos plurales y no respete esas dos cosas, está fuera de la pluralidad.
+ Habría que impulsar en los círculos católicos el ser adalides del respeto al otro y animar a la gente a participar en lo que quiera, es decir, con una pluralidad total. Y desde esa pluralidad total, hay que buscar el máximo acuerdo, los máximos puntos en común para después avanzar. Hacen falta personas con principios, con respeto y con amor a la pluralidad, que estén activas en la sociedad. En el ámbito de la Iglesia hay que animar a perder el miedo, la pereza, la comodidad, a participar en la sociedad.
+ Otro tema es la participación en el ámbito digital, que corre el riesgo de ser una presencia paralela y es muy relevante para jóvenes.
Colofón del encuentro (experiencia)
Ante la experiencia tan positiva de dialogo y escucha, los organizadores del evento (Secretariado Social Diocesano y Servicio Diocesano de Laicado) se están planteando la continuación del mismo.
19/11/2021