
Durante la misa en streaming desde Santa Marta, el Papa ha dirigido sus pensamientos hacia todos aquellos que están asustados ante el coronavirus.
«Oramos hoy por tantas personas que no pueden reaccionar: están asustadas por esta pandemia. Que el Señor los ayude a ponerse de pie, a reaccionar por el bien de toda la sociedad, de toda la comunidad», ha resaltado el Pontífice.
Su Homilía, ha estado basada en el Evangelio de Juan (Jn 8, 1-11). Este episodio cuenta la historia de dos mujeres a las que algunos hombres querían condenar a muerte: la inocente Susana y una adúltera atrapada en el acto. Francisco ha señalado que los acusadores son jueces corruptos en el primer caso e hipócritas en el segundo. En cuanto a las mujeres, Dios hace justicia a Susana, liberándola de los corruptos, que están condenados, y perdona a la adúltera, liberándola de los escribas y fariseos hipócritas.
El mensaje del Papa es el siguiente: nos invita a agradecerle a Dios el saber cuándo somos pecadores, porque solo de esta manera, podemos pedirle con confianza al Señor que nos perdone.
Además, el Papa se ha asomado una vez más este fin de semana a la ventana para bendecir una plaza de San Pedro totalmente vacía. Asimismo, se ha sumado a la petición de la ONU para un «alto el fuego total» ante la emergencia sanitaria por el coronavirus. “Los conflictos no se resuelven con la guerra. Es necesario superar los antagonismos y diferencias mediante el diálogo y una constructiva búsqueda de La Paz”.
Las misas celebradas por el papa Francisco en la Casa Santa Marta han comenzado a ser emitidas en directo desde que comenzó la crisis del coronavirus. Desde el mes pasado, son transmitidas a través del player de Vatican News en Youtube y son distribuidas por Vatican Media. Además, este enlace también está disponible en la web y Facebook de la Conferencia Episcopal Española.
De esta manera, el Papa ha querido mostrar su proximidad con las personas afectadas por el coronavirus. Las misas se celebrarán de lunes a sábado a las 7 de la mañana y durante su celebración no podrá haber presencia de fieles. Además, desde el mes de marzo, se reza el Ángelus y el Santo Rosario vía streaming para acompañar a todas las personas que permanecen en sus casas.