
Los instrumentos de financiación de la Iglesia Católica están sometidos de manera periódica a debate en los distintos medios de opinión pública. En unas ocasiones se reclama a la Iglesia que busque por sí misma mecanismos de «autofinanciación» renunciando a cualquier tipo de ayuda o colaboración pública. En otras ocasiones, por el contrario, se levantan voces reclamando pobreza. Al final, desde una y otra postura, la conclusión es la misma: debe desaparecer la colaboración del Estado con la Iglesia.
A lo largo del presente trabajo vamos a intentar exponer cuáles son las principales fuentes de financiación de la Iglesia y hasta qué punto ésta depende de la colaboración económica del Estado. Pero antes precisaremos qué entendemos por Iglesia Católica en España y cuáles son sus fines. Sólo desde esta perspectiva podremos entender, de manera correcta, las fuentes de financiación de la Iglesia y lo que ésta está aportando a la sociedad española.
ÍNDICE
I.- Introducción
II.- La Iglesia Católica en España
III.- Los fines propios de la Iglesia
IV.- La aportación de la Iglesia a la Sociedad
4.1. Actividad asistencial. Ahorro de costes para el Estado
4.2. El asunto de la educación
4.3. La demanda de servicios religiosos
4.4. El Asunto del Patrimonio
V.- Las fuentes de financiación
5.1. La colaboración del Estado
5.2. Las aportaciones directas de los fieles: prestaciones, colectas, limosnas y oblaciones
5.3. Los rendimientos del patrimonio eclesiástico
5.4. Otros
VI.- La austeridad en la Iglesia
VII.- El futuro de la financiación de la Iglesia