
23 de febrero de 2021
El cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), fue el encargado de presidir la eucaristía por las víctimas de la COVID -19, en el marco de la reunión de la Comisión Permanente en la sede de la CEE.
La iniciativa partió del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE), que invitaba a las Conferencias Episcopales de Europa a unirse en una cadena de oración con la celebración de la eucaristía en cada Conferencia Episcopal, en sufragio y memoria por tantas personas víctimas de esta pandemia.
El cardenal Omella ha pedido por todos los fallecidos
En su homilía, en la capilla de la Sucesión Apostólica de la Casa de la Iglesia, el presidente de la CEE ha pedido por todos los fallecidos, no sólo en esta pandemia debido a la Covid-19, sino también por los que han fallecido por otras causas ajenas al coronavirus y que, durante el tiempo de confinamiento, no han podido recibir la despedida merecida. «Hoy los recordamos a todos, fuesen creyentes o no, naturales de nuestra geografía hispana o venidos de otros lugares. Nos sentimos hermanos de todos y compartimos el dolor de todos sus familiares y amigos».
El cardenal Omella dedicó una mención especial a los mayores, un colectivo especialmente golpeado por la pandemia, a los que mostró su reconocimiento: «Han entregado su vida por hacer una sociedad más próspera. Damos gracias a Dios porque su vida ha sido un regalo para todos nosotros. Ojalá sepamos agradecérselo. Que Dios bendiga a nuestros hermanos mayores».
